El día de San Valentín queremos dedicar esta publicación a todo el equipo de voluntarios que regalan su tiempo libre, trabajo y dedicación al refugio y hacen posible que podamos salvar tantas vidas.
Son una parte imprescindible de este proyecto, y sin su presencia no seríamos capaces de sacar The Animal Academy adelante. Representan el amor por los animales en estado puro, porque están para los mimos pero también para las carretillas de caca… ¡Que ya podréis imaginar que son muchas!
Estamos enamorados de nuestros voluntarios, y los animales también. ¡Su cariño es el mejor regalo de San Valentín!